"Cinco de Noviembre"
Del otro lado del monitor que mostraba una W en un fondo blanco, se escuchó un golpe seco.
-¿Qué pasa Watari?... –pregunta un joven al que llaman por el nombre de Ryuuzaki.
No hay respuesta.
-¿Watari…? –pregunta esta vez temiendo la acertividad de sus instintos.
Yagami Light soltó una sonrisa que delataba sus más oscuras intenciones mientras nadie le miraba.
Del otro lado Watari tirado en el suelo de su oficina, con su mano derecha apretaba fuertemente su pecho. Era evidente, estaba teniendo un ataque al corazón. Él sabía que iba a morir, tenía que actuar rápido. Con sus últimas fuerzas logra alcanzar el teclado del computador y en el último intento presiona un botón en la parte trasera de éste y su último aliento dio fin a su historia.
En la habitación de un departamento viejo un celular comienza a vibrar en una mesa próxima a la ventana que daba frente al edificio de investigaciones y es cogido por una mano femenina que contesta la llamada. En la pequeña pantalla mostraba un mensaje de texto que decía:
“All Data Deletion”
Fue lo último que se vio en el monitor de Ryuuzaki para sorpresa de todos.
Ryuuzaki sintió un gran escalofrió que subía por su espalda y sus manos estaban rígidas sobre sus rodillas; sus ojos negros miraban fijo al monitor ensombrecidos.
-All Data Deletion ¿Que quiere decir eso? –pregunta Light con curiosidad.
- Le di instrucciones a Watari de borrar toda la información que el actualmente poseía si es que algo inesperado le ocurría…–Contesto Ryuuzaki. Mientras trataba de explicarse como pudo suceder, como pudo Kira matar a Watari. Amane no ha tenido la oportunidad de mirarle el rostro…Y Yagami Light… ¿Habría hecho algo minutos antes? No, no era posible por que él no había dejado que nadie supiera el verdadero nombre de Watari. Pero probablemente fue…
De pronto los demás policías se dieron cuenta que Rem, el Shinigami que los acompañaba ya no estaba entre ellos.
-Escuchen todos –llamó Ryuuzaki tomando la cucharilla de su café entre sus delgados dedos -El Shiniga… -Su voz fue súbitamente bloqueada por un fuerte y agudo dolor que impactó repentinamente en su pecho antes siquiera de poder terminar lo que pensaba, antes siquiera de poder revolver el café extra-dulce que tanto le gustaba. Estaba paralizado, su cuerpo estaba completamente tenso, no podía respirar, el dolor era increíble, se dejo caer de su silla. Se le iba la cabeza. Yagami Light lo cogió antes de impactar contra el suelo, gritaban su nombre pero para Ryuuzaki era como si estuviesen a metros y metros de distancia. Pero el rostro de Light que rebosaba de inmensa satisfacción era clara para él mientras este lo sujetaba entre sus brazos era lo único que sus abiertos ojos podían enfocar antes de que su visión se tornara borrosa y pudo pensar en una sola cosa en ese segundo; el tenia razón, Yagami Light “es” Kira. Pero…-Sus ojos cedieron y solo había oscuridad y un mortal silencio. Más el silencio duró poco, el gritó emanado por Light resonaba por toda la habitación, alarmando a todos los presentes de la sala.
Con falsa emoción bajó de sus brazos el cuerpo del que hasta hace instantes había sido su rival -¡Nosotros somos los siguientes ¡Watari, Ryuuzaki y ahora nosotros...! –Gritó histérico produciendo pánico entre sus compañeros. Todos esperaron aterrorizados que la muerte los abrazara a ellos también…. 30 segundos. La espera era caótica. 50 segundos, un minuto… Nada. Se miraron entre ellos buscando una respuesta y la tensión disminuyo poco a poco.
-D… deberíamos llamar a una ambulancia – dijo Mogi que fue el primero en reaccionar.
-Pero Ryuuzaki no tiene ID-respondió Aizawa
- Eso no tendría que ser un problema. Yo iré con él - El jefe de policía Yagami Soichiro se dispuso a realizar la tarea.
Todos ayudaron a cargar el cuerpo cubriéndolo con mantas, bajaron hasta el vestíbulo, unos guardias trataron de acercarse perturbados por el evidente cuerpo inerte pero Light les contestó antes que preguntaran que lo estaban trasladando de urgencia al hospital.
Ya afuera en el estacionamiento, pusieron el cuerpo de Ryuuzaki dentro del auto en los asientos traseros. Una vez ya dentro del vehiculo Souchiro arrancó a toda velocidad. Tomando la autopista principal llegaría en menos de 10 minutos al hospital más cercano, si es que mantenía una velocidad de 120 km.
Ya podía ver la edificación del hospital cuando por el espejo retrovisor vio como una camioneta blanca le hacia señales con las luces altas. Souchiro se preguntaba quienes eran. Se exaltó cuando su celular comenzó a sonar, lo tomó y vio que era un número privado, no sabía si hacerlo pero contestó la llamada.
-¿Quién es? –pregunto el ex jefe de policía.
-¿Yagami Souchiro? Soy Sarah Colins estoy en la camioneta blanca que lo sigue por detrás. Por favor, detenga su vehiculo en la próxima salida, sabemos que lleva con Ud el cuerpo de “L”. Hemos venido a reclamarlo –exigió con un tono de voz seco.
Yagami sorprendido por lo que le exige la mujer decide rebatirle.
-¿Cómo puedes asegurarme que lo que dices es verdad? No soy estúpido.
-Es bueno ser desconfiado pero no al limite de caer en la testarudez –contestó la mujer a punta de burla y antes de que Souchiro le contestara a su insolencia ella le interrumpe. –Esto ya estaba previsto por el Señor Watari e hizo ciertos arreglos en caso de su defunción, si a él le pasaba algo, también le pasaría a L, esas fueron las instrucciones y nosotros íbamos a saberlo en el acto.
Yagami Souchiro no sabía que hacer ni en que pensar, era evidente que ella conocía los detalles de lo ocurrido ¿cómo alguien externo podría saberlo? estaba confundido y su silencio otorgó ésta información a la misteriosa mujer quien comprendió su duda.
-“All Data Deletion” era la frase clave que anunciaba sus muertes y por consecuencia nos enviaron la información de los integrantes del grupo de investigación; si es que se pregunta de donde obtuve su número.
Por favor detenga el vehiculo. Por respeto a los deseos de L.
Yagami optó por obedecer, sus emociones le ganaron a su racionalidad, después de todo no tenía idea de cómo podría ser lo contrario. Aparcó a unos cuantos metros después de la salida de la autopista a cuadras del hospital, la camioneta blanca se detiene tras él y Yagami sale del vehiculo y se encuentra cara a cara con la mujer. Sintió como si el corazón se disparara al verla. Era hermosa y muy joven, vestía un terno negro ajustado mostrando su escote, esbelta, con una larga cabellera pelirroja intensa, liso que le cubrían sus pechos poco voluptuosos con la partidura al lado derecho y una piel blanca semejante a la leche. Pero usaba lentes oscuros, que desagrado fue pensar que sus ojos permanecerían en misterio.
-Dígame Señorita Colins ¿Cuál es la razón de tanta precaución? El chico ya esta muerto y yo podría llevarlo al hospital y evitar perfectamente explicaciones mayores.
-Puede ser, pero a causa del caso Kira los hospitales están muy susceptibles por los extraños ataques al corazón, así que si aparece un cuerpo por tales razones y sin ID llamarán a la policía de seguro y… la verdad es que la organización “L” quiere ahorrarse todas esas molestias de papeleos y tramites complicados, me entiende? –El tono burlesco con el que le hablaba a Souchiro lo comenzaba a enfermar –ahora si me disculpa –La mujer hace una señal con sus dedos y hombres vestidos como paramédico se bajan de la camioneta con una camilla, abren la puerta del vehiculo de Yagami y sacan el cuerpo de Ryuuzaki.
-¿Qué me dices Alfredo? –le pregunta a uno de los hombres que revisaban el cuerpo.
-Definitivamente es el que buscamos.
Confirmación de muerte; hace cerca de 20 minutos. –comienza a escribir en una ficha médica –Aproximadamente a las 8:40 PM… el cinco de Noviembre del 2004… probablemente a causa de un infarto al miocardio.
-De acuerdo, lo confirmaremos después con la autopsia –declaró la joven mujer.
El rostro de Yagami mostraba desesperanza y no podía evitar imaginar cómo su cuerpo seria cortado por completo, sintió nauseas. Bajó la mirada mientras introducían el cuerpo de Ryuuzaki dentro de la camioneta. La mujer lo observaba y le pregunta.
-¿Está UD bien Señor Yagami?
-El… era solo un crío, le faltaba tanto por vivir.
La mujer lo mira con cierto recelo -Creo que UD es una buena persona, por eso le pido de favor que no le mencione a nadie lo que acaba de pasar para mantener el absoluto anonimato… pronto le avisaré a su celular cuando y donde será enterrado. Con su permiso, me despido –diciendo esto se da la media vuelta y sube a la camioneta dejando al policía solitario con sus pensamientos.
Eran las 10:13 PM y dentro del cuartel estaban todos esperando a que Yagami Souchiro volviera con noticias. Pero pasaban su tiempo pensando en las razones de por qué no fueron ellos asesinados. Light solo se mantenía en un sereno silencio.
Se rompe el silencio con la entrada del jefe de policía con un rostro cansado y lleno de pesar, no fue capaz de mirar a los ojos a sus compañeros o de su propio hijo para confirmarles lo que ya todos sabían. Dudó un poco con respecto a la petición de mantener en secreto su encuentro con ese grupo de personas pero realizó que ya no importaba, después de todo…
-…Ryuuzaki está muerto.
-¿Qué pasa Watari?... –pregunta un joven al que llaman por el nombre de Ryuuzaki.
No hay respuesta.
-¿Watari…? –pregunta esta vez temiendo la acertividad de sus instintos.
Yagami Light soltó una sonrisa que delataba sus más oscuras intenciones mientras nadie le miraba.
Del otro lado Watari tirado en el suelo de su oficina, con su mano derecha apretaba fuertemente su pecho. Era evidente, estaba teniendo un ataque al corazón. Él sabía que iba a morir, tenía que actuar rápido. Con sus últimas fuerzas logra alcanzar el teclado del computador y en el último intento presiona un botón en la parte trasera de éste y su último aliento dio fin a su historia.
En la habitación de un departamento viejo un celular comienza a vibrar en una mesa próxima a la ventana que daba frente al edificio de investigaciones y es cogido por una mano femenina que contesta la llamada. En la pequeña pantalla mostraba un mensaje de texto que decía:
“All Data Deletion”
Fue lo último que se vio en el monitor de Ryuuzaki para sorpresa de todos.
Ryuuzaki sintió un gran escalofrió que subía por su espalda y sus manos estaban rígidas sobre sus rodillas; sus ojos negros miraban fijo al monitor ensombrecidos.
-All Data Deletion ¿Que quiere decir eso? –pregunta Light con curiosidad.
- Le di instrucciones a Watari de borrar toda la información que el actualmente poseía si es que algo inesperado le ocurría…–Contesto Ryuuzaki. Mientras trataba de explicarse como pudo suceder, como pudo Kira matar a Watari. Amane no ha tenido la oportunidad de mirarle el rostro…Y Yagami Light… ¿Habría hecho algo minutos antes? No, no era posible por que él no había dejado que nadie supiera el verdadero nombre de Watari. Pero probablemente fue…
De pronto los demás policías se dieron cuenta que Rem, el Shinigami que los acompañaba ya no estaba entre ellos.
-Escuchen todos –llamó Ryuuzaki tomando la cucharilla de su café entre sus delgados dedos -El Shiniga… -Su voz fue súbitamente bloqueada por un fuerte y agudo dolor que impactó repentinamente en su pecho antes siquiera de poder terminar lo que pensaba, antes siquiera de poder revolver el café extra-dulce que tanto le gustaba. Estaba paralizado, su cuerpo estaba completamente tenso, no podía respirar, el dolor era increíble, se dejo caer de su silla. Se le iba la cabeza. Yagami Light lo cogió antes de impactar contra el suelo, gritaban su nombre pero para Ryuuzaki era como si estuviesen a metros y metros de distancia. Pero el rostro de Light que rebosaba de inmensa satisfacción era clara para él mientras este lo sujetaba entre sus brazos era lo único que sus abiertos ojos podían enfocar antes de que su visión se tornara borrosa y pudo pensar en una sola cosa en ese segundo; el tenia razón, Yagami Light “es” Kira. Pero…-Sus ojos cedieron y solo había oscuridad y un mortal silencio. Más el silencio duró poco, el gritó emanado por Light resonaba por toda la habitación, alarmando a todos los presentes de la sala.
Con falsa emoción bajó de sus brazos el cuerpo del que hasta hace instantes había sido su rival -¡Nosotros somos los siguientes ¡Watari, Ryuuzaki y ahora nosotros...! –Gritó histérico produciendo pánico entre sus compañeros. Todos esperaron aterrorizados que la muerte los abrazara a ellos también…. 30 segundos. La espera era caótica. 50 segundos, un minuto… Nada. Se miraron entre ellos buscando una respuesta y la tensión disminuyo poco a poco.
-D… deberíamos llamar a una ambulancia – dijo Mogi que fue el primero en reaccionar.
-Pero Ryuuzaki no tiene ID-respondió Aizawa
- Eso no tendría que ser un problema. Yo iré con él - El jefe de policía Yagami Soichiro se dispuso a realizar la tarea.
Todos ayudaron a cargar el cuerpo cubriéndolo con mantas, bajaron hasta el vestíbulo, unos guardias trataron de acercarse perturbados por el evidente cuerpo inerte pero Light les contestó antes que preguntaran que lo estaban trasladando de urgencia al hospital.
Ya afuera en el estacionamiento, pusieron el cuerpo de Ryuuzaki dentro del auto en los asientos traseros. Una vez ya dentro del vehiculo Souchiro arrancó a toda velocidad. Tomando la autopista principal llegaría en menos de 10 minutos al hospital más cercano, si es que mantenía una velocidad de 120 km.
Ya podía ver la edificación del hospital cuando por el espejo retrovisor vio como una camioneta blanca le hacia señales con las luces altas. Souchiro se preguntaba quienes eran. Se exaltó cuando su celular comenzó a sonar, lo tomó y vio que era un número privado, no sabía si hacerlo pero contestó la llamada.
-¿Quién es? –pregunto el ex jefe de policía.
-¿Yagami Souchiro? Soy Sarah Colins estoy en la camioneta blanca que lo sigue por detrás. Por favor, detenga su vehiculo en la próxima salida, sabemos que lleva con Ud el cuerpo de “L”. Hemos venido a reclamarlo –exigió con un tono de voz seco.
Yagami sorprendido por lo que le exige la mujer decide rebatirle.
-¿Cómo puedes asegurarme que lo que dices es verdad? No soy estúpido.
-Es bueno ser desconfiado pero no al limite de caer en la testarudez –contestó la mujer a punta de burla y antes de que Souchiro le contestara a su insolencia ella le interrumpe. –Esto ya estaba previsto por el Señor Watari e hizo ciertos arreglos en caso de su defunción, si a él le pasaba algo, también le pasaría a L, esas fueron las instrucciones y nosotros íbamos a saberlo en el acto.
Yagami Souchiro no sabía que hacer ni en que pensar, era evidente que ella conocía los detalles de lo ocurrido ¿cómo alguien externo podría saberlo? estaba confundido y su silencio otorgó ésta información a la misteriosa mujer quien comprendió su duda.
-“All Data Deletion” era la frase clave que anunciaba sus muertes y por consecuencia nos enviaron la información de los integrantes del grupo de investigación; si es que se pregunta de donde obtuve su número.
Por favor detenga el vehiculo. Por respeto a los deseos de L.
Yagami optó por obedecer, sus emociones le ganaron a su racionalidad, después de todo no tenía idea de cómo podría ser lo contrario. Aparcó a unos cuantos metros después de la salida de la autopista a cuadras del hospital, la camioneta blanca se detiene tras él y Yagami sale del vehiculo y se encuentra cara a cara con la mujer. Sintió como si el corazón se disparara al verla. Era hermosa y muy joven, vestía un terno negro ajustado mostrando su escote, esbelta, con una larga cabellera pelirroja intensa, liso que le cubrían sus pechos poco voluptuosos con la partidura al lado derecho y una piel blanca semejante a la leche. Pero usaba lentes oscuros, que desagrado fue pensar que sus ojos permanecerían en misterio.
-Dígame Señorita Colins ¿Cuál es la razón de tanta precaución? El chico ya esta muerto y yo podría llevarlo al hospital y evitar perfectamente explicaciones mayores.
-Puede ser, pero a causa del caso Kira los hospitales están muy susceptibles por los extraños ataques al corazón, así que si aparece un cuerpo por tales razones y sin ID llamarán a la policía de seguro y… la verdad es que la organización “L” quiere ahorrarse todas esas molestias de papeleos y tramites complicados, me entiende? –El tono burlesco con el que le hablaba a Souchiro lo comenzaba a enfermar –ahora si me disculpa –La mujer hace una señal con sus dedos y hombres vestidos como paramédico se bajan de la camioneta con una camilla, abren la puerta del vehiculo de Yagami y sacan el cuerpo de Ryuuzaki.
-¿Qué me dices Alfredo? –le pregunta a uno de los hombres que revisaban el cuerpo.
-Definitivamente es el que buscamos.
Confirmación de muerte; hace cerca de 20 minutos. –comienza a escribir en una ficha médica –Aproximadamente a las 8:40 PM… el cinco de Noviembre del 2004… probablemente a causa de un infarto al miocardio.
-De acuerdo, lo confirmaremos después con la autopsia –declaró la joven mujer.
El rostro de Yagami mostraba desesperanza y no podía evitar imaginar cómo su cuerpo seria cortado por completo, sintió nauseas. Bajó la mirada mientras introducían el cuerpo de Ryuuzaki dentro de la camioneta. La mujer lo observaba y le pregunta.
-¿Está UD bien Señor Yagami?
-El… era solo un crío, le faltaba tanto por vivir.
La mujer lo mira con cierto recelo -Creo que UD es una buena persona, por eso le pido de favor que no le mencione a nadie lo que acaba de pasar para mantener el absoluto anonimato… pronto le avisaré a su celular cuando y donde será enterrado. Con su permiso, me despido –diciendo esto se da la media vuelta y sube a la camioneta dejando al policía solitario con sus pensamientos.
Eran las 10:13 PM y dentro del cuartel estaban todos esperando a que Yagami Souchiro volviera con noticias. Pero pasaban su tiempo pensando en las razones de por qué no fueron ellos asesinados. Light solo se mantenía en un sereno silencio.
Se rompe el silencio con la entrada del jefe de policía con un rostro cansado y lleno de pesar, no fue capaz de mirar a los ojos a sus compañeros o de su propio hijo para confirmarles lo que ya todos sabían. Dudó un poco con respecto a la petición de mantener en secreto su encuentro con ese grupo de personas pero realizó que ya no importaba, después de todo…
-…Ryuuzaki está muerto.
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